Estafa de millones: ¿Cómo Phil Ivey sacó 10 millones de dólares de un casino?
Phil Ivey se encuentra entre los nombres legendarios del póquer profesional. Su riqueza se estima en 30 millones de dólares, y algunos datos indican que son más de 100 millones. Una gran parte de ellos el estadounidense gana precisamente gracias a uno de los mejores juegos de cartas. Pero esa no es su única fortaleza. No si preguntas sobre su cuenta bancaria. Una de las habilidades que más fama le da a Phil es su juego de baccarat. Para aquellos que no estén familiarizados con sus reglas, en resumen, es un juego de cartas de casino que se juega entre el jugador y la banca.
Hace años, Ivey estaba en la cima de la fama del poker después de ganar su décimo brazalete de la Serie Mundial de Poker. Poco después, Phil visitó el Casino Borgata en Atlantic City y obtuvo una demanda por 10 millones de dólares. ¿La razón? El casino cree que la leyenda del póquer ganó la cantidad en cuestión mediante fraude.
La técnica del millonario es la llamada "clasificación de bordes". Con él, el jugador identifica pequeñas diferencias en las imágenes del reverso de las cartas y aumenta así sus posibilidades de ganar. Durante la partida del Borgata, Ivy no toca ni una sola carta, pero convence al croupier de que es extremadamente supersticioso.
Comenzaron largas discusiones sobre si esta acción de Ivy era legítima. Según él mismo, su beneficio es una cuestión de habilidad. Según Borgata, se trata de una técnica que se sale de las normas descritas y que la convierte en un fraude.
Al final, el tribunal decidió que el casino tenía derecho y debía ganar la disputa. Ivey y sus abogados están haciendo todo lo posible e impugnando las distintas instancias. Sus acciones no tienen éxito y, después de todas las increíbles batallas que gana, Ivy pierde una de las más importantes: la demanda por aproximadamente 10 millones de dólares.